Superando los 20 días sin transporte urbano de pasajeros, durante este mediodía, trabajadores de la empresa Montecristo, nucleados en la Unión Tranviaria Automotor ingresaron con bombos y sirenas a la municipalidad.
Ruben Aguilera, secretario general del gremio indicó que la responsabilidad política de “decidir si la empresa se queda o se va” corresponde al municipio, ya que “ellos deciden cuando se reactiva el servicio”.
Con respecto al cuidado de la fuente laboral, Aguilera dijo que “los trabajadores sufren una incertidumbre ya que, si bien existe el vínculo laboral, no cumplen con sus tareas y la empresa no recauda, por lo que no saben que va a pasar”.
Si bien solamente faltan detalles, durante esta jornada el municipio se reunirá con representantes de la empresa a fin de intentar cerrar el convenio que permitirá que volver a poner en las calles el servicio de transporte urbano de pasajeros.
UTA exige celeridad en el acuerdo de Montecristo y el municipio
